Aunque no le guste a todo el mundo

Tal vez alguien se ofenda por esto, pero bueno es lo que hay.

Me puse a contar nuestra historia por dos motivos, uno para que nos conozcan mejor y otro porque necesitábamos unas vacaciones del blog pero no queríamos dejarlo morir. Cuando decidí abrir el blog no tenía idea de que me iba a encontrar con otras familias como la nuestra y tampoco era mi intención, sólo quería que mi vieja pudiera ver como crecía su nieto con fotos y vídeos sin necesidad de ir saltando desde el fotolog a youtube (para quien no lo sabe mi vieja vive en Argentina y no conoce a su nieto)No es que mi madre sea tonta, pero no tiene internet en casa y es una utopía pretender que las computadoras de los cybers funcionen rápido. En fin, el asunto es que no esperaba encontrarme con todas ustedes (y en este punto va simplemente en femenino porque me refiero a todas esas madres y futuras madres que nos leen, que el resto me perdonen)Pero aquí es tan fueron apareciendo y fuimos conociéndonos de a poco. Hasta que las conocimos a ustedes las parejas de chicas que conocíamos no querían tener hijos y la única que conocimos con hijos una de ella no los quería y recalcaba todo el tiempo que eran de la otra. De modo que ustedes abrieron una ventana que reconsiderábamos inexistente. Empezamos a escribir muy emocionadas, a contar nuestra vida y a compartirla con ustedes con las que tienen hijos y con las que están pasando por la dura tarea de escribir a la cigüeña. Todo iba muy bien nos daban más ganas de demostrar al mundo que es posible, que se pude tener una familia feliz a pesar de las dificultades, hasta que un día leímos un comentario que les hacían a unas mamás (que personalmente creo que son unas mujeres increíbles) en el que les decían que estaban obligando a su hijo a ser heterosexual porque contaban que el pequeño estaba enamorado de una nena. Alguien seguro va decir que no es tema nuestro, que es asunto de ellas, pero si la idea es que luchemos por nuestros derechos eso es parte de ellos no podemos permitir que salten con semejante boludes. Después de haber leído eso pusimos en este espacio nuestro enojo, pero eso no quedo ahí, siguieron pasando cosas con gente que hacía comentarios de este tipo y para colmo cuando yo comencé a contar nuestra historia nos hicieron el mismo comentario estúpido. Fue por eso que decidimos tomarnos un tiempo para reflexionar y el recordar nuestra historia nos fue ayudando a plantearnos algunas cosas que no nos habíamos planteado antes.

Una de las cosas que discutimos tuvo que ver con el reconocimiento de nuestra orientación sexual y por suerte las dos tuvimos una cosa en común, para ninguna supuso ningún trauma, es decir en ningún momento nos planteamos que estábamos haciendo algo malo, no se nos ocurrió que Dios nos castigaría, que nuestros padres morirían del disgusto o que nuestros amigos nos atarían una piedra de molino al cuello y nos arrojarían al mar. Y creo que no nos planteamos estas cuestiones por un simple y sencillo motivo, por la forma en la que nos educaron nuestros padres. A ella la educaron en un ambiente en el que había gran variedad de gente, de todo tipo de creencias y condición social, en el que una persona debía aprender a hacerse valer. Por mi parte mi mamá se encargo de hacerme crecer rodeada de amor, por nuestra constitución familiar siempre me enseñaron que los lasos sanguíneos son lo de menos y que lo importante es el amor. De formas distintas las dos familias nos dejaron un mensaje claro, por más que nos acostáramos con elefantes lo importante era ser buenas personas, con principios y leales. Por eso llegado el momento en cuanto decidimos que nos gustaba más la bella durmiente que el príncipe azul no se nos ocurrió que fuera algo malo.

Cuando una ve una formula que funciona tiende a imitarla y eso es lo que hacemos nosotras. No creemos que la debamos decirle a nuestros hijos que ser heterosexual es malo ni limitarnos a omitir el asunto, no planeamos inculcarle de ningún modo una orientación sexual, como tampoco criarlo en una burbuja, sabemos que la mayoría de la gente es heterosexual y que lo más probable es que ellos también lo sean. Pero queremos que en el momento que elijan una pareja nos lo cuente y no se le ocurra que pueda llegar a arder en los fuegos eternos aunque venga con una novia oveja. A veces miro a mi Coquito y pienso que sería más fácil si fuera homosexual porque no tendría vergüenza de presentar a su familia, pero después me doy cuenta que lo importante no es el novio o la novia lo importante es que le enseñemos a no tener vergüenza de lo que es ni de quienes somos nosotras y que tampoco juzgue a las familias de los demás.

Dicho esto aclaro que no vamos a habilitar la moderación de comentarios, estamos dispuestas a escucar hasta la más absoluta boludes, pero después nos encargaremos de descuartizar y riduculizar a cuanta mente oblicua se nos cruce jaajajajaja Mentira, no vamos a educar a nadie más que a nuestros hijos (el actual y los futuros)pero no esperen que dejemos de usar palabras o frases hechas comunes, como por ejemplo "pobre cuando tenga novia con dos suegras" o decirle que se "haga hombre" porque primero yo le digo que se "haga hombre" a todo cristo y segundo creo que esas frases hechas con las que me he criado no son la base real de su educación y una buena educación si se basa en saber enseñar a diferenciar eso.